EL HOMBRE ES LA
CÁMARA
El hombre de la cámara es una película creada en 1929 por el
director ruso Dziga Vertov con una duración de 68 minutos, en esta se dedica a
presentar la vida cotidiana de una ciudad como san Petersburgo. Comenzando
desde una mujer durmiendo cómodamente en su cama, los indigentes en los parques
también dormidos y una ciudad que aún no despierta a medida del desarrollo del
film se muestra como la ciudad comienza a despertar, con imágenes de los
primeros trenes de la mañana, la agitación de las personas que van hacia su
trabajo y la ciudad despierta finalmente, las fabricas abren sus puertas y las
personas se mueven más rápido mostrando el caos de la vida laboral. Así
trascurre el día mientras la carama observa todas las problemáticas que ocurren
en la vida diaria de las personas.
A lo largo del film podemos observar como el hombre y la
cámara se hacen uno, casi logrando que el lente de la cámara se convine con los
ojos del hombre mostrándonos la realidad que este vive, la cámara y el hombre
se encuentran en todas partes filmando la vida diaria de todas las personas a
su alrededor y de la misma forma filmado la vida de la cámara. De alguna forma
la cámara trata de introducir al espectador en las simultáneas situaciones que
se pueden vivir en un día normal mostrando no solo las partes positivas, sino
también las negativas como el incendio que tiene que ser atendido por los
bomberos o la llamada a la ambulancia.
Pero la cámara también puede llegar a alterar el orden y la
cotidianidad de las personas, como aquellas que no quieren ser grabadas y se
cubren el rostro, demostrando con esto que si bien la cámara desea retratar la
realidad tal cual la ve, también puede alterar esta. Jugando con la realidad y
la fantasía en incontables tomas fragmentas y llevándonos a pensar en cual
puede ser la realidad y cuál puede ser solo una ilusión creada por la misma
cámara. Dándole de esta forma un protagonismo a la cámara que deja de ser un
objeto inanimado para convertiré en una extensión de los ojos de la persona
detrás de ella obteniendo con esto una grabación de por vida de todo aquello
que se capta ya ahora no solo con la mirada sino también en vídeo.
El conclusión la cámara desea mostramos la vida cotidiana de
la forma más detallada posible, pero no lográndolo completamente ya que su
simple intervención altera la realidad. Aun así la cámara nos pone en una
posición de observador bastante interesante, donde nos deja a pensar cual es la
realidad y cual es una alteración debido a la cámara misma, este es el mismo
motivo que hace más interesante la película ya que es imposible definir todas
las escenas con certeza y de esta forma siendo una obra muy interesante de
analizar para el espectador.
Valentina plazas
revisada.
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